Un día en «La Era»

Hemos creado un nuevo concepto de alojamiento rural: la versión 2.0 del Hotel Rural Era de La Corte.

En esta casa, disfrutarás de la tranquilidad y el espíritu positivo que desprende cada rincón y, sobre todo, de la sensación de pertenecer a nuestra familia. Desde que entras por la puerta, pasas a ser parte de la historia de La Era.

Te presentamos un recorrido y descripción de las salas comunes de la casa, donde podrás hacer vida hogareña y compartir experiencias e historias con otros huéspedes.

El patio

El patio y su gran portón de madera dan la bienvenida a los huéspedes con el olor de los jazmines, variedad de plantas crasas y la zona techada en la que podrás desayunar disfrutando del amanecer, o cenar observando las estrellas. Si el cielo está despejado, es un espectacular punto de observación del cielo. ¡Y sin salir de casa!

El salón

Antiguo patio interior de la casa, María Victoria y Andrés decidieron cerrar este espacio consiguiendo una zona común cómoda y agradable, gracias tanto a las tonalidades de sus paredes y mobiliario como a la puerta con sus cristales de colores. La atmósfera del salón cambia con la luz. ¡Es un sitio increíble para charlar, leer o, incluso, teletrabajar!

La Biblioteca

Puedes encontrarla en el salón y descubrirás que tiene gran variedad de libros sobre historia de Canarias, así como de su flora, fauna, geografía y muchos otros temas relacionados con las islas y, en especial, sobre Fuerteventura. También dispone de una sección en la que nuestros huéspedes han dejado sus libros (los hay en varios idiomas) para que otros puedan disfrutar de su lectura.

Sala de masajes y yoga

Situada sobre el comedor de invierno, en esta sala podrás practicar tus asanas de yoga, recibir un masaje o desconectar del mundo que te rodea y conectar contigo mismo a través de la meditación. Pregúntanos por las posibilidades de masaje en esta isla y concertaremos una cita para que recibas el masaje que mejor te venga.

 

La cocina

La cocina es el corazón de cualquier casa y en esta, tu casa majorera, no iba a ser menos. Ubicada donde antes estaba el granero, María Victoria y Andrés decidieron situarla en una zona de paso entre las estancias interiores y exteriores como punto de encuentro de sus huéspedes. Recuerda que aquí puedes prepararte cualquiera de las comidas, ya que dispone de todo lo necesario (incluida una despensa y neveras en las que puedes almacenar los alimentos), pero… ¡Nosotros lavamos los platos!

 

El comedor de invierno

Justo entre la cocina y el salón se encuentra el comedor de invierno, que conserva algunos de los muebles originales de la casa y en el que, a veces, alguno de los huéspedes que nos visitan se deciden a tener una cena romántica a la luz de las velas o, incluso, jugar una partida de cartas en grupo.